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Diego Arribas - foto de obra artística

Obra artística

Arte público

Diego Arribas – Obra artística



De cuando fui feliz (creo)

  • Postes de madera y esmalte sintético
  • 3 x 5 x 16 m
  • 2003

La obra ganó el 2º premio en el Concurso de Instalaciones del IES Pirámide en la Universidad Laboral de Huesca, en cuyos jardines ha quedado instalada permanentemente. Una evocación de la adolescencia. Lejos de la imagen edulcorada y bobalicona con la que suele representarse, la adolescencia constituye una de las etapas más complejas de nuestra existencia, en la que se dirime un buen número de conflictos. Periodo de transformación, doloroso e irreversible como el de la crisálida, permanece en un difuso rincón de nuestra memoria al que solo tenemos acceso cuando, de forma fugaz, nos asalta el recuerdo de una melodía, el pasaje de un libro, el olor de la madera del pupitre o aquel nombre garabateado en la libreta.




Relieves para fachada

  • Hormigón
  • 150 x 70 x 10 cm. cada pieza
  • 1997

Encargo del Ayuntamiento de Monreal del Campo para la señalización de la Casa de la Cultura y el Museo Monográfico del Azafrán, un proyecto impulsado por el etnólogo Julio Alvar inaugurado en 1983. Los dos relieves están instalados en la fachada principal del edificio que los alberga, construido en el siglo XVII, flanqueando su entrada. La tipología de los relieves responde a una clara línea constructivista, caracterizada por la intersección de planos y volúmenes sencillos y un geometrismo puro desprovisto de adornos superficiales.




Monreal XXI

  • Tubos de hierro, pizarra y hormigón
  • Rotonda de 10 metros de diámetro
  • 2005

La obra se sitúa en la Plaza de España de Monreal del Campo, junto a la carretera nacional 211 a su paso por la localidad. Es un conjunto escultórico formado por tres elementos: un haz de tubos de hierro rojos de más de 6 metros de altura, un muro de pizarra abierto en el centro y una hilera de bloques azules de hormigón que lo atraviesa. Se trata de una interpretación simbólica de dos de los elementos más característicos de Monreal: el azafrán (los tubos rojos), y el río Jiloca (los bloques azules de hormigón). El muro de pizarra representa el cambio de siglo, atravesado por el curso del río. La obra escenifica una apuesta por el progreso de la localidad, reflejado en la expansión ascendente de los brines y en el flujo continuo del río, capaz de vencer todos los obstáculos.




Ese viento alegre

  • Tubos de hierro y acrílico
  • 370 x 80 x 15 cm
  • 2006

La obra fue seleccionada para participar en la convocatoria de Arte Público Hermandades Escultóricas, organizada por el MACAY, Museo de Arte Contemporáneo Ateneo de Yucatán, en México. Consta de doce tubos de hierro pintados, que fueron instalados en el Paseo de Montejo, la arteria principal de la ciudad de Mérida, capital del estado de Yucatán. Con posterioridad, la obra se trasladó a España, quedando instalada definitivamente en el Colegio Público de Educación Especial La Arboleda, donde los alumnos la intervinieron bajo la dirección de su profesora, la artista Lucía Villarroya.




Ekiar Abejuela

  • Piedra
  • 6 m de diámetro x 1,8 m de altura
  • 2020

La obra está instalada en la localidad de Abejuela (Teruel), en el sendero de gran recorrido GR 10 que une Valencia con Portugal, junto al camino que une Abejuela con Andilla (Valencia). Según los arqueólogos, el término ekiar en la lengua ibérica se identifica con una producción artística o artesanal. Si bien la principal ocupación actual de los habitantes de Abejuela es la agricultura y la ganadería, también son herederos de una larga tradición de construcciones en piedra seca. Una actividad artesanal prácticamente desaparecida a la que he querido rendir homenaje denominando a esta obra Ekiar Abejuela, una construcción concebida como lugar de encuentro y descanso para los senderistas, abierto a la bella panorámica de Abejuela y a su entorno natural.


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